Surtido y Calidad

Alacena de Aragón es una tienda en la que puedes encontrar todo tipo de productos de alimentación con un denominador común: su calidad.

Es uno de esos comercios que atrapan por los sentidos. Ofrece un gran surtido de productos de alimentación, todos ellos de una gran calidad, pero sin resultar caros. Su propietario, Santiago Angulo, trabaja directamente con proveedores con los que ha creado vínculos estrechos y consigue para su establecimiento productos diferenciados.

El 90% de los productos son de Aragón, pero también tienen de otros lugares. “A los clientes les llama mucho la atención lo que tenemos y llegan muchas veces por el boca oreja. Son gente a la que le gusta experimentar con la cocina, con las marcas, que le da valor a la gastronomía, a probar cosas nuevas…”.

El que entra a la Alacena de Aragón no va a comprar a ciegas, porque allí asesoran y recomiendan los productos más adecuados para cada necesidad. Además, también organizan catas, que ahora se están haciendo de forma online a través de Instagram. “Es una forma de atraer gente a la tienda y dar a conocer a productores”, señala Angulo. Este ex trabajador de una multinacional dedicada a la informática, montó el negocio cuando se quedó en paro. “Tenía afición por viajar y conocer los productos de los pueblos y se me ocurrió montar este comercio”.

Alacena de Aragón llama la atención y casi todo el que entra se lleva algo. Así, realizan alrededor de 300 ventas al día y también tienen pedidos online, de hecho, la tienda empezó como ecommerce. Huyen de llamarse tienda gourmet porque no quieren que se les identifique con productos caros: “tenemos mucha variedad con precios asequibles”.

El vino es su producto estrella, pero su variedad va mucho más allá: cervezas artesanas, chocolate, quesos y embutidos, aceite, conservas, dulces, charcutería al corte… La lista es interminable.

Son bastante activos a través de sus redes sociales y su blog, y promocionan sus productos en estas plataformas, pero la mayoría de sus clientes entran atraídos por su escaparate, que van cambiando habitualmente.

Al estar en el centro, en la calle Don Jaime, también entran turistas, pero Angulo asegura que el producto aragonés todavía se conoce muy poco fuera de nuestras fronteras regionales. “Más allá del Jamón de Teruel hay un gran desconocimiento y cuando prueban algo se llevan una sorpresa muy agradable”.

Fotografías de Marcos Cebrián

Vídeo de Amaury Cabrera